¿Cómo saber si el coche que quieres comprar es robado?
Las tendencias de compra en España demuestran que una de las opciones más frecuentes entre los conductores, es la compra de un coche de segunda mano es.
De acuerdo con la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y otras leyes complementarias, la garantía de este tipo de vehículos debe ser formalizada por escrito con independencia de la factura o del contrato de compra-venta. En dicha operación, ya sean transacciones entre particulares o con profesionales, es conveniente hacer un contrato por escrito donde queden reflejadas las condiciones de la venta.
Con todo, aunque no se formalizara expresamente un contrato de garantía la ley establece un plazo de seis meses para que el comprador de un automóvil pueda exigir del vendedor el saneamiento por los vicios ocultos que pueda tener el vehículo. Esto último afecta por igual a las operaciones entre particulares. Es por ello que, ante la perspectiva de tener que hacer frente a las averías que sufra el vehículo vendido, muchos vendedores optan por adquirir una Garantía mecánica Comercial para librarse de esta carga posventa.
No obstante, puede darse el caso de un miedo mayor muy frecuente entre la sociedad, ¿y si el coche que quiero adquirir es robado? Si caes en este tipo de engaño, no podrás hacer ningún tipo de reclamación, puesto que su legítimo propietario tendrá todo el derecho a reclamar el bien sustraído.
En la compraventa de automóviles usados muchos delincuentes encuentran su pequeño «paraíso». Un producto que tiene un alto valor y cuya salida es bastante rápida, por la necesidad que genera en nuestra sociedad. Por ello, muchos ladrones, después de sustraer un coche, deciden venderlo en otro país o lo desguazan para distribuir sus piezas por separado. Para evitar este tipo de situaciones, te traemos tres consejos:
Informe de Antecedentes del Vehículo
Cuando te interese un coche, lo primero que debes hacer es solicitar a la Dirección General de Tráfico el Informe de Antecedentes del Vehículo. Estos datos corroborarán que no existe ningún problema a la hora de hacer la transacción y te informarán de su última ITV, si tiene multas pendientes y si todos los impuestos están al día. Su precio es de unos 8 euros.
Comprueba los datos
Si percibes que alguna de las informaciones del vehículo no se corresponde con su documentación, descarta la compra. Revisa, por ejemplo, el número de bastidor (el cual se puede ver fácilmente en la luna delantera o en el motor) y los kilómetros que tiene el coche, ya que éste es uno de los timos más usados en la compraventa de segunda mano. En este caso puedes comprobarlo con los kilómetros que tenía el coche en los papeles de su última ITV.
Sospecha de los actos “desesperados”
Asegúrate de que el vendedor deberá facilitarte toda la documentación oficial del vehículo, desde sus permisos a las revisiones pertinentes. No te fíes de posibles excusas y no adelantes ningún tipo de dinero en forma de fianzas o pagos por adelantado. Si su actitud parece demasiado desesperada por hacer la venta, lo mejor es que busques otro coche.
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