El mundo de las motos es tremendamente variado. Hay pocos modelos de motocicletas que sean realmente iguales que otros. Además, cada conductor tiene sus propias manías y tics al conducir o realizar los mantenimientos. A pesar de ello, sí que es verdad que encontramos ciertos patrones en lo relacionado a las averías que sufren estos populares vehículos.
A lo largo del siguiente artículo haremos un repaso de las averías graves que puede sufrir tu moto de segunda mano. Una información fundamental para moteros.
Averías en la bomba de combustible
La bomba de combustible es un sospechoso habitual en lo que a averías se refiere. Este componente es el responsable de que el combustible llegue al motor. Un indicador de que la bomba no está funcionando correctamente son los cambios bruscos en la potencia de la moto o dificultades a la hora de arrancarla.
Lo mejor que puedes hacer en estos casos es llevarla a tu taller de confianza. Puede que, a pesar de la avería, logres arrancar la motocicleta e, incluso, llegar a tu destino sin mayores dificultades. Por mucho que pienses que el problema no irá a más, lamentamos decirte que irá a más. Así que no olvides acudir al taller mecánico. El precio de la sustitución de la bomba de combustible varía dependiendo del modelo, pero suele rondar entre los 50€ y los 150€.
Problemas con el embrague
Los problemas en el embrague nunca son leves pues representan graves trastornos para la conducción y por lo tanto para la seguridad del conductor. El mejor consejo para tener el embrague siempre en correctas condiciones es su periódica lubricación con aceite.
Entrando de lleno en las averías de los embragues de moto encontramos el principal problema en el tensado del cable. Otros elementos que pueden ocasionar dificultades son los muelles que tienden a perder elasticidad y los discos que sufren gran desgaste con el paso del tiempo. Las reparaciones relacionadas con el embrague pueden conllevar un coste de 300€.
La moto pierde líquidos
Una moto que pierda líquidos es la demostración de que algo no está funcionando como debería. Al identificar la perdida de líquidos es necesario establecer el punto de escape. De esta forma sabremos si es necesario reparar alguna fuga. Salvo sorpresa también habrá que rellenar el líquido perdido.
Los ejemplos clásicos de escapes de líquido son el carburante, el lubricante o el aceite. Aunque creas que el problema ya está solucionado, acude a un taller mecánico para que realicen una inspección. Los problemas derivados de la perdida de líquidos en una moto suelen conllevar un pago en torno a los 200€.
Fuentes: GarantiPLUS y Freepick. Garantiplus, líder en el sector de las Garantías Mecánicas nos interesan vuestras opiniones. Contrata ya tu extensión de garantía mecánica para vehículo de ocasión.
