Impuestos compraventa

¿Qué impuestos hay que pagar en la compraventa de un vehículo?

La adquisición o venta de un vehículo conlleva la obligación de pagar diversos impuestos, ya sea un coche nuevo o usado. Las responsabilidades fiscales difieren en ambos casos y es esencial tener en cuenta estos aspectos al considerar la transacción, especialmente en un momento en el que los precios de los vehículos, tanto nuevos como de segunda mano, son elevados.


El Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) se aplica a las adquisiciones intracomunitarias de vehículos nuevos realizadas por empresarios, profesionales y particulares. Este impuesto también afecta a la compra de vehículos usados si son vendidos por una empresa en el ámbito de una actividad empresarial o profesional.

El Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte (IEDTM), conocido como impuesto de matriculación, es otro tributo que se paga al comprar un vehículo nuevo. También es aplicable a la compra de vehículos de segunda mano no matriculados en España.

La cuantía de este impuesto varía en función de las emisiones contaminantes del vehículo, oscilando entre el 0% y el 14,75%, pudiendo llegar al 16% en algunas comunidades autónomas.

Es responsabilidad del comprador liquidar este impuesto, aunque es común que el concesionario se encargue de su tramitación ante la Agencia Tributaria.

Impuestos coche

La compraventa de vehículos entre particulares conlleva el pago del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales Onerosas (TPO). Este impuesto forma parte de la modalidad de transmisiones patrimoniales onerosas del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITP-AJD), y el formulario a presentar es el 620.

La gestión de este impuesto está cedida a las comunidades autónomas, lo que implica variaciones en sus características según la región. El plazo para liquidar el impuesto y el tipo impositivo aplicable varía también entre comunidades. Por ejemplo, mientras que en Navarra el plazo es de dos meses, en Madrid o Castilla y León es de 30 días hábiles.

El TPO oscila entre el 4% y el 8%, dependiendo de la comunidad autónoma. La cuantía se determina utilizando tablas de valoración de vehículos usados publicadas por Hacienda, que incluyen modelos y versiones de todas las marcas. Se aplica un porcentaje de depreciación en función de los años de uso del vehículo. Diversas comunidades autónomas establecen tipos diferentes según características como la cilindrada o los caballos fiscales. Informarse detalladamente sobre las particularidades del impuesto en la comunidad autónoma correspondiente es aconsejable.

IVA. El comprador es quien debe abonar el IVA, que generalmente es del 21% sobre la base imponible, aunque para vehículos destinados a personas con movilidad reducida, el tipo es del 4%.

IEDTM. Respecto al Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte, o impuesto de matriculación, existen exenciones para algunos vehículos, como los destinados a personas con movilidad reducida, taxis y motocicletas con cilindrada igual o superior a 250 cc.